Sentencia. La sentencia trata del personal de trenes de larga distancia, en cuya cabina la empresa dispone un papel para que los empleados firmen al iniciar la jornada y en el que aparecen los tiempos fijos estimados de inicio y fin de la jornada, pero no los reales. El problema, por tanto, no es el registro en papel, sino que este no refleja la jornada real y no es objetivo ni fiable.
Válido. De hecho, es perfectamente válido un sistema de registro en el cual el trabajador declara a diario (mediante una aplicación informática u hojas escritas) el tiempo diario efectivo trabajado.
Idea final. El registro de jornada en papel o en Excel es totalmente válido.